Homilia Pascual Padova

Buona Pasqua a Tutti  –  Homilía de la Santa Misa de Pascua en la Basilica del Santo en Padova   –  Homilía en español

Homilia Pascual Padova

Podemos reanudar varios hilos en esta noche santa
Atar nuevamente aquellos hilos que o bien habían quedado suspendidos o incluso se habían desgarrado en los últimos días
Sí, porque la gran fuerza que estalla y emana de la resurrección de Jesús nos permite retomar todas aquellas historias que en los últimos días habían quedado suspendidas, para ahora llevarlas a su cierre.
Por lo tanto, podemos volver a reanudar, retomar algunos de estos hilos.

Homilía Pascual Padova comenzamos con:

El hilo de la mirada, el hilo de los ojos

Veamos la figura de San Pedro para atar este hilo.

Creo que todos tenemos a San Pedro en mente.
No tanto como el que traicionó a Jesús, sino como el que en cierto momento, dejándose traspasar el corazón por la mirada de Jesús, se arrepintió y rompió en llanto.

Tratemos de pensar cuáles habrán sido los sentimientos de San Pedro al sentirse mirado por estos ojos tan buenos tan compasivos tan inconmensurablemente tiernos del Señor Jesús

Y luego San Pedro habrá visto al Señor resucitado y de nuevo se habrá cruzado con su mirada

Y realmente tenemos que preguntarnos si Pedro se maravilló más por el perdón que recibió del Señor después de su traición o si se maravilló aun más por verlo resucitado.

No se cual fue su mayor asombro

Tal vez en realidad quiere decir que si Pedro cree que en el resucitado es porque primero experimentó toda la bondad y toda la ternura

Para Pedro, la Resurrección comienza allí con el perdón del Señor y es ya un anuncio pascual para cada uno de nosotros.
Realmente podemos tener la experiencia pascual de la Resurrección de la vida que se reanuda cuando también nosotros podemos saborear esta ternura infinita que el Señor Jesús siempre nos concede.

Y si dejamos atrás el hilo de los ojos…

Podemos atar ahora…

el hilo de la escucha el hilo del oído

Nos colocamos al lado de María la madre del señor
Aquí está el tesoro que tomo de una hermosa reflexión de un excelente monje hombre de oración que observa:

Pensemos en María al pie de su cruz según el evangelista Mateo que escuchamos el domingo
hay un Centurión que primero habrá dado la orden de muerte
“claven a ese hombre en la cruz”
Y poco tiempo después escucha a este mismo hombre, el Centurión, que después de haber visto todo declarará, hará su profesión de fe: “realmente este hombre era hijo de Dios”

Ya que pensamos en el oído de María, que en muy poco tiempo escucha, primero a un hombre que condena a muerte a su hijo y luego a ese mismo hombre que declara que Jesús es el hijo de Dios

El corazón de María todavía habrá estado lleno de la tragedia de la pérdida de Jesús.
Y, sin embargo, para ella la palabra ya era un anticipo de la Resurrección.
Porque el asesino es el primero en declarar a Jesús hijo de Dios
Para nosotros otra oportunidad de vivir la Resurrección es cuando, en medio de tanta violencia, cambiamos una sola palabra buena que hable de vida. Es ya un preludio, es ya un anticipo.

Pero aqui continuamos brevemente con estos hilos

El hilo de los pies

Hemos dado lectura del echo antes de la Pascua de:
María Magdalena que se inclina a los pies de Jesús y vierte una enorme cantidad de perfume de nardo sobre estos pies, y como querían interrumpirla Jesús des dice:
Dejen que ella me unja, perfumando el cuerpo para el entierro por adelantado.

Aquí escuchamos a estas mujeres, esta noche, que se acercan a los pies de Jesús, los abrazan, los adoran.

Ya no son los pies de un hombre sepultado, ya no se necesita perfume para ungir a un difunto.
Ahora se necesita todo el amor bendito de las mujeres que se inclinen sobre ese cuerpo de amor que ven en esos pies traspasados la señal de la vida, de la vida donada para Siempre, otra oportunidad de tener una experiencia de Semana Santa.

He aquí una persona que da vida y que hace de su presencia una continua oportunidad de dar.

A precio de llagas a precio de heridas pero son heridas de vida

Homilia Pascual Padova ahora vemos otro hilo más: la tierra

El hilo de la Tierra que tiembla

Escuchamos que la tierra tembló cuando Jesús murió.

El evangelista Mateo nos lo contaba el domingo pasado y nuevamente esta noche, que la tierra tiembla cuando aparece el Ángel. Tiembla de nuevo.
Pero Mateo ya lo había anticipado.
La tierra que tiembla y se estremece, se podría decir quizás, porque la creación cae en el caos:
Cuando Jesús muere, la creación se sumerge en la de-creación
la creación es fagocitada por la nada

No: Jesús resucita, y esa tierra que tiembla es señal de que los sepulcros se abren.

Mateo ya lo había anticipado: muchos cuerpos de santos muertos saldrán de los sepulcros y se aparecerán a muchos viniendo a la ciudad santa de Jerusalén.

Aquella tierra tiembla porque se abre y deja salir de la noche los cuerpos de los santos muertos

También nosotros podemos experimentar la Resurrección cuando nos dejamos sacar de las tinieblas, de la tumba, de los sepulcros de nuestros miedos, de nuestras infidelidades, y nos dejamos acoger de nuevo por el Señor Jesús.

Un último hilo, tal vez el mas sugerente, nos queda por anudar.

El hijo del Ángel que se encuentra con las mujeres y para que anuncien la resurrección

Hemos oído al ángel decirle a las mujeres que vayan a decirle a sus discípulos

La mujeres parten, y se encuentran con Jesús. Y Jesús parece corregir las palabras del ángel y dice:
Vayan y no digan a mis discípulos, sino a mis hermanos.

Aquí me parece hermoso pensar esto
Aquí están los discípulos que se habían dividido sospechosamente ante el anuncio de la traición en la última cena.
Ahora en cambio son declarados Hermanos del Señor Jesús
El Señor ha resucitado y es el que vuelve a unir los Vínculos, el que restablece las relaciones.
La primera palabra que dice el Señor resucitado es una palabra para nosotros, y nos dice: ustedes son mis hermanos, ustedes son mis hermanas
Otra experiencia de resurrección

Pascua de Resurrección es reconcilación y anudar los hilos de nuestra historia

Hacemos Pascua de Resurrección cuando hacemos todo lo posible para restaurar la reconciliación en nuestros frágiles lazos

Así que la Pascua es para aquellos que tienen el coraje de volver a atar los hilos.

Cómo hacerlo? Cómo volver a unir los hilos de nuestra vida y vivir la Pascua?

Cada uno de nosotros tiene sus propias respuestas, pero me gustaría sugerir y cerrar con una clave de lectura.

El ángel dice a las mujeres que buscan a Jesús el crucificado y el crucificado es la imagen suprema del amor al más alto nivel
Buscar al crucificado es buscar la medida de un amor sin medida
la medida inconmensurable de un amor inmenso

Aquí estamos buscando muchas cosas en nuestra vida.

Al la hora del fin lo único que buscamos es el amor

Pero a la hora del fin, lo que buscamos es el amor, la medida inconmensurable del amor
Aquí creo que si nos dejamos guiar por este tipo de búsqueda, la búsqueda de un amor inconmensurable, también nosotros podremos unir muchos hilos y celebrar la Pascua con Jesús.